martes, 18 de septiembre de 2012

domingo, 16 de septiembre de 2012

Después del bombardeo (16 de septiembre de 1955. Golpe a Perón )




 EL golpe del 16 de septiembre del '55 fue la consumación de los intentos criminales que sucedieron a manifestaciones de odio de clase, que habían alcanzado su punto mas alto en el bombardeo a la Plaza de Mayo. Hablaban de dictadura peronista, de necesidad de diálogo, de recuperar la libertad, de estar aislados del mundo y de que eran la oposición unida (que si lo eran: comunistas, socialistas, radicales, conservadores, liberales, militares y la embajada yankee) de defender la democracia, de oponerse a una nueva reelección... Lo que siguió fue fusilamiento de obreros y de militares democráticos, la proscripción del peronismo, derogación de facto de la Constitución revolucionaria... Supieron desde el principio que debían hacer olvidar que un pais con justicia social, soberanía política e independencia económica, con capacidad de liderazgo y una propuesta regional era posible. Se trataba de retornar al paradigma de que las desigualdades sociales no pueden resolverse y mucho menos en paz. El odio cundió a extremos como el de la destrucción de todo lo que pudiese recordar al peronismo. No sólo los monumentos y placas, fotografías, papelería oficial, misiones sociales: Edificios fueron destruidos, obras públicas y hospitales fueron abandonadas, proyectos con destino social terminaron sirviendo a intereses contrapuestos.

Se llego al extremo absurdo de demoler la histórica residencia presidencial que ocupaba el solar en el que hoy está la Biblioteca Nacional porque había sido ocupada por una década por Perón y fue donde Evita convaleció hasta su muerte. Acusaciones inverosímiles contra Peron, Evita y el peronismo circularon como historia. Toda una maquinaria de infamias tendientes a justificar lo que se sostenía con represión, sometimiento y explotación. Dos décadas después refinarían métodos y recursos para volver a hacerlo con los mismos cómplices activos y los que desde presuntos lugares del "progresismo" y la "izquierda" aceptaban como inexorable o hasta justificable o "necesario". No olvidar las lecciones de la historia es el único remedio preventivo. Firmes y atentos frente al mensaje del odio, para dar sentido a la palabra democracia y defender la vida de los argentinos. En este día de luto para el Pueblo recordamos a nuestros héroes y mártires. Viva la Patria!

miércoles, 22 de agosto de 2012

Trelew

 



El 22 de agosto de 1972, durante la dictadura militar que encabezaba Alejandro Lanusse, los presos políticos de la carcel de Rawson (combatientes de las organizaciones armadas Montoneros, FAR y ERP) que se habían entregado durante la fuga consumada una semana antes, recibieron la orden de salir de sus celdas y formarse en dos hileras que fueron ametralladas sin aviso. En ese acto de cobardía fueron muertos los compañeros Rubén Pedro Bonet, Eduardo Adolfo Capello, Mario Emilio Delfino, Alberto Carlos del Rey, Clarisa Norma Lea Place, José Ricardo Mena, Miguel Angel Polti, Ana María Villareal de Santucho, Humberto Segundo Suarez, Humberto Adrián Toschi, Jorge Alejandro Ulla, Carlos Alberto Astudillo, Alfredo Elías Kohon, María Angélica Sabelli, Susana Graciela Lesgart de Yofre y Mario Pujadas. Sólo 3 sobrevivieron al fusilamiento y los remates: Ricardo Haidar, María Antonia Berger y Alberto Camps (quienes serían desaparecidos luego del golpe de estado cívico militar de 1976)

La dictadura intentó simular otro intento de fuga. La policía impidió el velatorio en la sede del Partido Justicialista de la Avenida La Plata destruyendo su frente y sacándo los féretros.
(la foto es del dia de la entrega, el 15 de agosto)